Después de unas semanas complicadas para el club culé por la guerra abierta entre futbolistas y dirigentes (principalmente entre el capitán, Lionel Messi y el director deportivo, Eric Abidal), sumado a la derrota en el Clásico ante Real Madrid en el Santiago Bernabéu, la calma parece estar llegando de a poco en el Barcelona.
El ajustado triunfo ante Real Sociedad (gol de Messi de penal sobre el final del partido) y la derrota de los Merengues ante el Betis lo depositaron nuevamente en lo más alto de La Liga española, superando a su eterno rival por 1 punto.
En todo ese contexto, se volvió a respirar aires de tranquilidad en el Barcelona, en lo más alto de la competición local y con una serie levemente a su favor ante Napoli por los octavos de final de la UEFA Champions League.
Como es de costumbre, Gerard Piqué es famoso por sus recurrentes bromas y cargadas fuera del campo de juego (hasta a veces dentro del mismo) y en esta oportunidad su víctima fue el propio entrenador, Quique Setién.
En la práctica matinal del miércoles, el defensor le metió un túnel al director técnico, que culminó en risas de ambos, un abrazo y un saludo al camarógrafo.
Piqué es conocido por ser uno de los grandes animadores del club culé, y aunque en algunos medios en los últimos días han manifestado una ruptura con Lionel Messi, se los suele ver pasando momentos juntos fuera de la cancha.
Ahora se vienen tiempos claves para el Barcelona que buscará pasar a la siguiente instancia del máximo torneo europeo y consagrarse por tercera vez consecutiva campeón de La Liga española, donde aún queda un largo camino de 11 fechas, que de todas maneras podría cambiar su curso debido a las determinaciones que están tomando tras los casos de público conocimiento con el coronavuirus, después que la Organización Mundial de la Salud la haya decretado como una pandemia.