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Ante la dura situación económica que atraviesa el FC Barcelona derivado de la pandemia del Covid-19, por la cual se suspendió La Liga local, la Champions League, las visitas al museo, los tours al Camp Nou y hasta bajó la venta de indumentaria oficial, los dirigentes del club, encabezados por su presidente Josep María Bartomeu, buscan tomar medidas urgentes para intentar cubrir el presupuesto.
La principal y más delicada es la rebaja salarial propuesta al plantel de Primera División, motivo por el cual se juntaron con los referentes (Leo Messi, Sergio Busquets, Gerard Piqué y Sergi Roberto) para comentarle la situación actual de la institución y analizar la mencionada deducción de sus ganancias.
Lo que se dio a conocer en las últimas horas es que los jugadores no habrían aceptado la propuesta inicial y las negociaciones seguirán en los próximos días para llegar a un punto de acuerdo entra ambas partes.
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Lo que entusiasma a la dirigencia es que el plantel sabe la delicada situación que se está viviendo económicamente en el mundo por el coronavirus y tiene buena predisposición para encontrar una solución a este tema.
Por otra parte, lo que preocupa a la cúpula del FC Barcelona es el desconocimiento de cuando se reactivará la actividad para estimar las pérdidas económicas generadas al club.
La masa salarial del primer equipo es de 555 millones de dólares (31 millones menos que en la temporada anterior), lo que representa un 66 por ciento del presupuesto de la entidad azulgrana (804 millones de euros).
Coutinho, un alivió económico sin resolución
https://twitter.com/arsene_tina/status/1242535968806187008
La salida del atacante brasileño podría generarle un ingreso fundamental para el club, pero a pesar del interés de varios clubes, sobre todo de la Premier League como el Chelsea -principal candidato-, Arsenal, Manchester United y Tottenham, ninguno estaría dispuesto a poner los 90 millones de dólares que pidan por él.
La acción económica ante la inactividad
Los futbolistas que integran los clubes de Primera y Segunda División del fútbol español verán reducidos sus ingresos en un 10 por ciento en caso que la competición no pueda reanudarse esta temporada.