Getty Images.
En los últimos dos meses, Mike Tyson fue tendencia constantemente en las redes sociales por alguna que otra locura, alguna que otra anécdota, que despertaba el interés de la audiencia. Se trata de una estrategia de promoción. A los 53 años, Iron Mike quiere volver a pelear. El excampeón de los pesos pesados del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) tenía como primera opción de rival al británico Tyson Fury.
Fury es la gran figura de la categoría. A comienzos de 2020 venció a Deontay Wilder y conquistó el cinturón del CMB, el único que le faltaba para ratificar su estirpe de campeón total. Le sobran motivos para darle el gusto al nacido en Brooklyn. Sin embargo, rechazó la propuesta de su colega.
En una reciente entrevista, el británico reveló las cifras que estipulaban recaudar los promotores de ese histórico combate. Ni más ni menos que 500 millones de dólares. Una bolsa que hubiera sido un récord en la historia del boxeo.
“Mike Tyson me estaba hablando de cifras como 500 millones de dólares y esas cosas. Y lo que se ofreció, lo que llegó en el papel, fue como esto debe de ser una broma. Alguien está loco”, expresó.
De acuerdo a su palabra, cuando vio los contratos para aceptar el duelo se dio cuenta que la cifra era increíblemente inferior a lo que había conversado con quien sería su futuro adversario.
“Tuve una oferta de 10 millones de dólares de ESPN para hacer la pelea como exhibición pero creo que todos se han echado atrás ya”, remarcó.
El motivo por el que rechazó pelear con Tyson, sin embargo, no es económico. Aunque claro está que la cifra propuesta inicialmente lo hubiera hecho a cambiar de opinión. Fury no quiere arriesgar su prestigio “por un par de cacahuates”.
¿Arriesgarse a qué? A que los aficionados del boxeo lo acusen por haberse abusado de un hombre de 53 años. Tyson será Tyson, pero sus cualidades son parte de la historia, de un pasado de juventud que lejos está de este hombre que aún conserva su agilidad pero que no le duraría más que un round a un muchacho de 30 años.
Cuando mucho, la experiencia de Mike podría servirle para ser un gran entrenador, oficio al que por ahora se rehúsa. El excampeón quiere consolidarse aún más en el negocio del cultivo del cannabis de alta cepa, un emprendimiento que le reporta varios millones de dólares al mes.
“Me hubiera encantado compartir ring con él pero si hubiera ganado, la gente habría dicho que soy basura porque un hombre de 53 años me golpea y, si lo hubiera golpeado yo, habría sido un matón”, remarcó Fury.
