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Por ahí dicen que no hay nada más poderoso en la vida que los genes, y que el talento es lo primero que los hijos suelen heredar de sus padres. Y ese parece ser el caso de los hijos de Jennifer López y Marc Anthony, pues unas semanas después de que la pequeña Emme dejará con la boca abierta a millones de personas en el mundo, con su actuación en el Super Bowl, ahora el turno fue para Max, el otro hijito de la famosa pareja.
Y es que el pequeñín de 12 años dejó ver que es dueño de una melodiosa y potente voz, digna de admirar, y que no tiene nada que envidiarle ni a su hermanita ni a sus padres.
Así se puede apreciar, a través de un video compartido por la propia intérprete de “Let’s Get Loud”, donde se observa a Max haciendo su debut oficial como cantante, en un evento en su escuela en Nueva York, donde interpretó a uno de los personajes del clásido El Mago de Oz.
El el clip se observa a Max en plena acción, dejando ver que además carece de pena escenica y por el contrario tiene mucha desenvoltura y frescura a la hora de cantar.
Como era de esperarse, la actuación del niño llenó de emoción a la famosa madre, quien estuvo al borde de las lágrimas.
“Mi munchkin más pequeñito. Mamá orgullosa. El Mago de Oz”, fue el comentario con el que la preciosa Jennifer, de 50 años presumió de su hijito, en un video que en unas horas superó los 5 millones de vistas.
Para Jennifer sus hijos siempre serán motivo de orgullo, y aunque haya pasado el tiempo y los pequeños estén ya casi en la pubertad, la cantante reveló que no por ello deja de consentirlos y referirse a ellos con un particular apodo a sus hijos, casi desde que son bebés.
“Hogar dulce hogar. Sentada aquí con mis cocos (coconuts) y sintiéndome muy agradecida. ¡GRACIAS a la Asociación @lafilmcritics! Con humildad y muy honrada. #Ramona #hustlersmovie #LAFCA”, fue el comentario con el que hace unos meses la Diva de El Bronx hizo público el sobrenombre con el que se refiere a sus niños.
Y al referirse a la razón por la que llama a sus hijos con el apodo de “cocos”, la cantante ha asegurado en varias ocasiones que les puso el sobrenombre porque sentía que sus cabelleras se parecían a la deliciosa fruta.
“Ellos son mis cocos, ese apodo vino de cuando eran pequeños y estaban en sus cunas y les comenzó a crecer el cabello, parecían cocos, ambos se ven como cocos”, confesó la estrella al sitio Celebbaby, donde agregó que para honrar a sus hijos lleva una cadena con dos dijes en forma de cocos con las iniciales de sus pequeños.
Los pequeños nacieron el 22 de febrero del 2008, producto del matrimonio de Jennifer y Marc Anthony, y desde entonces se han convertido en la razón de vivir de la Diva de El Bronx y de su padre.
