La séptima temporada de EXATLON Estados Unidos está en pleno furor tras la primera semana de haber regresado a la pantalla chica, y mientras los televidentes ya van viendo mejor quiénes son los atletas más fuertes y aquellos que no están tan comprometidos, uno de los deportistas del team Azul hizo una revelación.
José Kuthy, quien contó con la mala suerte de lesionarse en el primer capítulo de EXATLON MUNDIAL, tras sufrir un tirón en el hombro, que lo llevó a estar en la silla mientras se recupera, confesó algo que descubrió en el show después de su primer circuito.
El mexicano, sin ningún reparo, aseguró que lo que el público ve desde sus casas, comparado con el nivel de dificultad real que tienen las pruebas en vivo y en directo, son como la noche y el día.
“Al ser la primera carrera, al ser el primer circuito, vi que es que no se asemeja en nada a lo que sale en la tele. Una vez lo presencias y ves, estando en frente, y ves el circuito, es algo que impone muchísimo”, comentó el nutricionista de 26 años en un video del programa en su cuenta de Instagram.
Kuthy, quien ha señalado las ganas de segur en la llamada Competencia más feroz del planeta, dijo incluso que los retos generan mucho miedo entre los concursantes, más ahora que se han quitado ciertas protecciones en las áreas de juego, como comentó Chelly Cantú.
“Es muy impactante. Da mucho miedo. Cuando lo ves en la tele, se ve muy fácil, pero la verdad es que no está tan fácil”, agregó el integrante de los Contendientes.
Tras sufrir su lesión, Kuthy ha sido muy honesto sobre su sentir, y aunque afirma que ha querido entender ese incidente como una “señal de Diosito” para que aprenda que a los circuitos hay que respetarlos y hay que tener mucho cuidado, no ocultó su tristeza por estar en el banquillo.
“La verdad tengo mucha impotencia… perdón (por llorar), porque cuando vine a esta competencia le prometí a mi familia y a mi novia dejarlo todo, y la verdad es que cuando pasó eso (la lesión), lo primero que dije fue ‘ya valió, ya valió’. Todo lo que he luchado para estar aquí y que por… no quiero decir ‘mala suerte’, porque siento que es una prueba que me están poniendo allá arriba para levantarme más fuerte que nunca”, comentó el deportista.
El concursante de EXATLON MUNDIAL mostró su fe religiosa y advirtió que espera que la fuerza divina lo ayude a no salir de la competencia, y dijo que cada día se ha ido recuperando más.
“Y espero en Dios que pueda seguir adelante. Me siento bien. Ahorita no siento dolor, pero como cualquier lesión, se requiere tiempo en reposo, y lo que diga el médico”, mencionó el mexicano.
“Pero también me duele que no pueda apoyar a mi equipo y siento que estando sentado ahí verlos competir. No me queda más que trabajar, motivarlos, y me siento con mucha impotencia”, concluyó el atleta.