Mezcalent Rafael Amaya podría haber abandonado sus terapias en medio de su proceso de rehabilitación.
Rafael Amaya podría haber abandonado sus terapias para enfrentar sus adicciones al alcohol y sustancias estupefacientes. El actor mexicano fue dado de alta de la clínica de rehabilitación “Baja del Sol” en México en el mes de diciembre de 2020.
Según la revista Quién, Julio César Chávez (propietario de la clínica), aseguró que Amaya dejó de asistir a sus terapias en medio de su favorable mejoría: “A él le falta seguir yendo a pláticas… Si recaes no preguntes por qué, es porque no vas a tus juntas”.
El afamado boxeador mexicano también mencionó que Rafael Amaya goza de un buen estado de salud en la actualidad: “Anda muy bien gracias a Dios, esperemos que siga así y le va a ir muy bien, gracias a Dios”.
Al ser cuestionado por el show ‘Ventaneando’ sobre el proceso de recuperación de Amaya, Chávez respondió: “Es un niñote, es una finísima persona, es un excelente ser humano. La verdad no es porque estuvo ahí en la clínica, sino porque simplemente lo demostró a través de su recuperación… Al convivir con todos los pacientes y al no sentirse más que los demás, al sentirse que él también era un adicto en recuperación, eso le dio mucho más valor”.
En su conversación con ‘Ventaneando’, Julio Cesar Chávez advirtió que la ausencia en las terapias puede representar una fuerte recaída en las adicciones para cualquier paciente: “Si uno deja de asistir a sus juntas le entra a uno la depresión, le entra a uno las ganas de consumir y esto es sólo por hoy. Cuando sientas ganas de consumir, rápidamente debe hablar con sus terapeutas o con sus psicólogos, ir a juntas y curarse. Esa es la mejor manera de estar limpio”.
Rafael Amaya estuvo recluido en una clínica de rehabilitación
A inicios del mes de diciembre de 2020, Rafael Amaya ofreció una reveladora entrevista exclusiva a la revista People en Español en donde confesó que había estado recluido en una clínica de rehabilitación por varios meses para recibir la ayuda necesaria para superar sus adicciones al alcohol y drogas.
“He estado cuatro meses en una clínica que se llama Baja del Sol y me ayudaron. Estuve en rehabilitación y le agradezco a Dios, a mi equipo de trabajo, a mi familia, a todos mis hermanos, primos. A toda la gente que nunca quitó el dedo del renglón, aunque no sabía que ellos estaban al pendiente de mí. Se convirtieron en mis ángeles guardianes mientras yo estaba sumergido y aislado”, mencionó Amaya en la entrevista.
En ese momento, el actor destacó que continuaba asistiendo a juntas, pero que estaba por concluir su tratamiento y proceso de recuperación: “Sigo yendo a juntas, pero estoy terminando mi proceso. Esto es de por vida. Fue un tratamiento de cuatro meses y estoy muy agradecido, contento. Tengo la fe en mis manos, siento una tranquilidad como nunca la había sentido y la rehabilitación es para quién quiere”.
Amaya fue dado de alta de la clínica de rehabilitación en diciembre de 2020
Carlos Appel, director del centro de rehabilitación “Baja del Sol” y primo de Rafael Amaya, dio a conocer a mediados del mes de diciembre de 2020 que el intérprete había sido dado de alta, por lo que habría terminado con completo éxito su proceso de recuperación.
En entrevista con el show de entretenimiento “Ventaneando”, Appel prefirió no ahondar en detalles sobre la salida de Amaya del centro de rehabilitación, esto por motivos de privacidad en los casos de los pacientes.
A inicios del mes de diciembre, el actor de ‘El Señor de los Cielos’ destacó que sus adicciones lo sumergieron en un mundo que desconocía: “Perdí mi paz interior, el amor que le tenía a mi familia, a mi trabajo. Poco a poco me fui sumergiendo en el fango oscuro del alcohol y las drogas, viviendo todos los excesos posibles habidos y por haber”.