Las imágenes revelan las inhumanas circunstancias en que viven 3.800 prisioneros en una cárcel en Filipinas construido para 800 personas. Los presos -que están mezclados con sospechosos y quienes se encuentran cumpliendo una condena- no tienen espacio para dormir, no tienen qué comer o donde hacer sus necesidades dentro de la cárcel Quezon City. La suciedad, las enfermedades, los desordenes carceleros y la falta de espacio son comunes. La grave carencia de comida hace que ellos coman insectos o cucarachas para poder sobrevivir. A la hora de dormir, buscan rincones, huecos en las escaleras para acostarse. Los hombres se turnan para dormir en el suelo de cemento agrietado de una cancha de baloncesto y muchos duermen de cuclillas. Un ex prisionero llamado Raymund Narag es quien revela la situación deplorable que viven miles de presos en Quezon City, en su libro "La Libertad y la Muerte Dentro de la Cárcel". Narag narra las horrendas condiciones que viven los presos. Él explica que es un lugar donde es una batalla constante por tener espacio, agua y comida en un lugar lleno suciedad. "Durante casi siete años he experimentado la muerte cada momento de mi vida dentro de la cárcel", dijo Narag en entrevista con The Daily Mail. "Los presos son propensos a las enfermedades contagioso debido a las malas condiciones de vida en sus celdas. Duermen en celdas superpobladas y con poca ventilación. El suministro de agua potable es muy limitado. las raciones de alimentos tienen un contenido nutricional inadecuado. Los reclusos enfermos y sanos se agrupan en las mismas celdas". Haz clic para ver y leer más sobre las calamidades que pasan los reclusos en Quezon City. (Getty)