Miles de salvadoreños tienen los días contados en Estados Unidos porque pronto tendrán que abandonar sus hogares para regresar a su país. La administración de Trump anunció este lunes 8 de enero que Estados Unidos cancela el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés). Los salvadoreños tienen hasta el 9 de septiembre de 2019 para abandonar los Estados Unidos.
El programa fue creado para darle la oportunidad a los salvadoreños abandonar su país y vivir en Estados Unidos temporalmente, tras el devastador terremoto en 2001. Tras estar bajo el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) salvadoreños podían vivir y trabajar legalmente en Estados Unidos.
El presidente de El Salvador, Salvador Sánchez tuiteó sobre la prórroga al Estatus de Protección Temporal. Además añadió que ayudará en la búsqueda de que sus compatriotas logren una estabilidad migratoria en Estados Unidos.
Los salvadoreños tienen 18 meses para ver la manera cambiar su estatus migratorio, o tendrán que abandonar los Estados Unidos.
La decisión de cancelar la TPS se tomó apenas unas semanas después de que más de 45,000 haitianos perdieran las protecciones otorgadas después del terremoto de Haití en 2010, y sugirió que otros en el programa, ósea, los hondureños, pronto podrían perder su estatus también. Los nicaragüenses perdieron sus protecciones el año pasado.
Los defensores de los inmigrantes y el gobierno salvadoreño habían suplicado a los Estados Unidos que extendieran el programa, como lo han hecho varias veces desde 2001. “Teníamos la esperanza de que si trabajábamos arduamente, pagábamos nuestros impuestos y no nos metíamos en problemas, podíamos quedarnos”, dijo Veronica Lagunas, de 39 años, una salvadoreña que trabaja en oficinas de limpieza durante la noche en Los Ángeles, tiene dos hijos nacidos en los Estados Unidos y posee una casa móvil, a NYTimes.
El diario reportó que la administración dijo que “el programa de Estatus de Protección Temporal, conocido como TPS, se convirtió en un beneficio casi permanente para cientos de miles de personas”.
Mientras que el Departamento de Seguridad Nacional dijo que debido a que se habían reconstruido las carreteras, escuelas, hospitales, hogares y sistemas de agua dañados desde los terremotos, los salvadoreños ya no formaban parte del programa. El departamento dijo en un comunicado, “el secretario determinó que las condiciones originales causadas por los terremotos de 2001 ya no existen. Por lo tanto, según el estatuto aplicable, los actuales TPS la designación debe ser terminada”.
Los países que han recibido la ayuda de protección y luego la perdieron incluyen a Bosnia y Herzegovina, que soportó una guerra civil en la década de los noventas, y Guinea, Sierra Leona y Liberia durante la crisis del Ébola. El Salvador fue uno de los primeros países en el programa debido a su guerra civil; esa designación expiró en 1994.
El Salvador se ha reconstruido desde los desastrosos terremotos. Pero la violencia – San Salvador es considerada una de las ciudades más peligrosas de la Tierra – ha impedido la inversión y la creación de empleos, y ha provocado a miles de personas huir del país.
La administración está dando a salvadoreños en el programa hasta septiembre de 2019 para dejar todo en orden y abandonar los Estados Unidos. Después de eso, ya no tendrán permiso para permanecer en el país, lo que les obligará a tomar una decisión desgarradora y muy triste. Muchos salvadoreños con hijos nacidos en Estados Unidos tendrán que decidir si separan a sus familias o se llevan a sus hijos a El Salvador o quedarse en el país con miedo a ser deportados.