Este lunes 8 de noviembre, Estados Unidos reabre las fronteras terrestres con México y Canadá, que hasta entonces estaban abiertas para viajeros que eran considerados esenciales. Los viajeros no esenciales, a lo que a partir de entonces se otorga permiso de cruzar a suelo estadounidense, deberán cumplir una serie de requisitos.
Las medidas se dan en el marco de una reapertura general de las fronteras, que incluye otras vías y otros países, y que es consecuencia de la presión ejercida por las industrias que dependen casi con exclusividad de la afluencia de turistas.
En primer lugar, cabe destacar que todos los viajeros por vía terrestres provenientes de México y Canadá deberán estar completamente vacunados para ingresar a los Estados Unidos. Además, deberán mostrar un certificado de prueba de coronavirus de resultado negativo realizado con 72 horas de anterioridad al momento del arribo.
Cabe indicar que lo niños menores de 18 años están exceptuados de vacunarse para ingresar al país estadounidense. En tanto que sí deberán mostrar el test negativo de coronavirus. Los niños menores de 2 años tienen permitido el ingreso libre, sin demostración de documento médico alguno.
La mayoría de los viajes entre Canada y México hacia los Estados Unidos se dan por vía terrestre.
Claro que la apertura de la frontera terrestre para viajeros provenientes de esos dos países se da en un contexto de aflojamiento de las restricciones de movimientos. Las medidas también afectan a los viajeros que llegan especialmente de Europa por la vía aérea.
Los no vacunados
El gobierno de Joe Biden abrió un vacío legal que permite a determinadas personas no vacunadas ingresar a los Estados Unidos. Se trata de casos de excepción.
La Casa Blanca entiende que hay países en los que aún la vacunación contra el coronavirus se despliega a un ritmo lento. Por eso confeccionó una lista de 50 países cuyos viajeros que quieran ingresar a Estados Unidos por “razones humanitarias” o de “emergencia” podrán hacerlo independientemente a su estado de vacunación.
Este tipo de viajeros, exceptuados de la norma general de la vacunación, deberá ser aprobado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Cabe señalar que los viajeros que quieran ingresar a los Estados Unidos podrán hacerlo habiéndose vacunados con cualquiera de la vacunas aprobadas por la Organización Mundial de la Salud.
La única vacuna que de momento no está autorizada por los Estados Unidos como garantía de ingreso al país es la rusa Sputnik V.
El rol determinante de las aerolíneas
Las aerolíneas, para el caso de los viajes por vía aérea, serán las responsables de controlar que los viajeros cumplan con los requisitos dictados por el gobierno.
Tal como informa el portal de noticias Infobae América, el incumplimiento podría derivar en multa de hasta 35 mil euros.
En el caso de los viajeros que acceden por vía terrestre, deberán mostrar los certificados de vacunación y test negativo a los agentes de Aduana y Protección Fronteriza.
Si bien el relajamiento de las medidas supone una esperanza para la industria del turismo en los Estados Unidos, las medidas de ningún modo restablecerán las condiciones previas al estallido de la pandemia.
Es que en varios países de Europa y sobre todo en China las restricciones de volar a los Estados Unidos, y a otros puntos del planeta, siguen vigentes. Hasta marzo de 2020, el aluvión de turistas chinos representaba un negocio importante para el turismo de los Estados Unidos.
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