Es habitual leer de vez en cuando este tipo de noticias, pero no por ello deja de ser menos sorprendente. Una joven de 20 años, Timesha Beuchamp, que había sido declarado muerta por los médicos, volvió a la vida en plena funeraria en Detroit.
Todo empezó este domingo 23 de agosto, según informa Telemundo Nueva Inglaterra, cuando el departamento de bomberos de Southfield informó que los paramédicos habían intentando reanimar una joven que habría sufrido una parada cardíaca. Tras 30 minutos de intentar recuperar sus pulsaciones, determinaron que no había señal de vida y declararon que la joven había muerto. En palabras del departamento de bomberos:
“Dadas las lecturas médicas y el estado de la paciente, se determinó en ese momento que no presentaba señales de vida. Se contactó a la oficina del médico forense del condado de Oakland y se le dieron los datos médicos. Se determinó nuevamente que la paciente había fallecido y el cuerpo fue entregado directamente a la familia para que hiciera los arreglos necesarios con la funeraria de su elección”.
Hasta aquí el relato parece el habitual, pero los hechos dieron un vuelco en la funeraria.
En la preparación de su funeral se dan cuenta de que está viva
Cuando llegó a la funeraria James H. Cole de Detroit, el personal se preparó para embalsamarla y dejar el cadáver listo para poder iniciar el velatorio su posterior funeral. Sin embargo, en ese momento se dieron cuenta de que la presunta fallecida, Timesha Beuchamp, aún respiraba.
En palabras a la cadena de televisión WXYZ de Detroit, el abogado contratado por la familia de la joven, Geoffrey Fieger, explicó que realmente faltó muy poco para que los propios servicios de la funeraria la mataran sin saberlo: “Estaban a punto de embalsamarla, lo cual es más aterrador si no hubiera tenido los ojos abiertos, habrían comenzado a drenarle la sangre”.
La mujer fue luego llevada al hospital Sinai-Grace, donde se sabe que se encuentra fuera de peligro, pero no han trascendido más datos sobre ella.