En un hecho que volvió a poner de manifiesto la urgencia de que aquellos adultos que tengan armas extremen medidas para evitar que estén al alcande de los niños, un pequeño de tan solo 2 años en el estado de Maine agarró la pistola de su papá y disparó el arma mientras el hombre y su espossa estaban durmiendo.
La noticia fue revelada por el periódico New York Post, donde se reveló que la Oficina del Sheriff del condado de Sagadahoc confirmó el hecho y aseguró que el padre del menor y dueño del arma accionada, identificado como Ian Carr, de West Bath, de 25 años fue arrestado.
Aunque afortunadamente no hubo una tragedia mortal, el disparo hecho por el niño alcanzó a su madre, quien fue herida en una pierna.
Las autoridades aseguraron, de acuerdo al citado medio, que la imprudencia del padre del menor con su arma hubiese podido terminar con un desenlace más fatal, no solo por lo que hubiera podido pasar con los adultos, sino que además en el cuarto se encontraba el hermanito del niño, un bebé recién nacido.
Sobre el bebé, quien tiene 3 meses, se aseguró que resultó ileso.
El citado medio manifestó que tras el incidente, el propio padre se entregó a la policía y enfrenta cargos por poner en peligro el bienestar de un niño.
La policía aseguró que el arma accionada por el niño de 2 años era una Glock 9 mm, que se encontraba en una mesa de noche.
WGME 13 reveló que la mamá del pequeño, quien tiene 22 años, fue trasladada a un centro asistencial, donde fue atendida por la herida y aseguró que aunque Ian Carr no sufrió un impacto directo, sí recibió fragmentos de bala en la cabeza.
El NY Post reseñó que en diálogo con los medios, el alguacil del condado de Sagadahoc, Joel Merry, arremetió fuertemente contra los padres del niño que disparó por “descuido”.
“Hay que subrayar la gravedad de este incidente. Esta situación fácilmente podría haber sido fatal. El descuido es asombroso”, dijo Merry. “Sin embargo, la ley actual solo permite que se imputen cargos por un delito menor. Cada propietario de cualquier arma de fuego debe ser responsable de la custodia de sus armas cuando haya niños presentes en el hogar, especialmente niños pequeños curiosos”.
Tras el incidente y viendo la gravedad de los hechos, los niños fueron retirados de la casa de la pareja y fueron puestos bajo custodia de familiares, de quienes no se reveló su identidad, según el reporte policial.
Tanto la madre, como el padre, fueron atendidos en la clínica y se encuentran fuera de peligro, pero Ian Carr tendrá que enfrentar a la justicia por su decuido y tiene una audiencia programada ante el juez el próximo 10 de agosto.