El pasado fin de semana el expresidente Trump vio brillar el horizonte para él, en medio de un multitudinario rally en Ohio, donde prometió que los republicanos recuperarán pronto el poder político en el país, en medio de vitores de la gente, pero ahora el cielo luce bastante oscuro para el magnate, y los problemas judiciales lo persiguen.
La Organización Trump y su exdirector financiero, Allen Weisselberg, están bajo la lupa de la justicia, luego de señalarse que la Fiscalía de Manhattan asegurara que enfrentan acusaciones por un esquema de fraude en primer grado, que data de un período de 15 años.
Así lo reveló el periódico New York Times, donde se mencionó que una acusación de un gran jurado muestra que las presuntas conductas habrían ocurrido entre marzo de 2005 y junio del 2021.
El documento fue respaldado por el saliente fiscal de Distrito neoyorquino, Cyrus Vance, que lleva dos años tratando de recavar pruebas.
“[Integraron] un esquema que constituía una conducta sistemática en curso con la intención de defraudar a más de una persona y obtener propiedad de más de una persona bajo pretenciones fraudulentas, representaciones y promesas”, aseguró parte del documento acusatorio, según lo dio a conocer el periódico El Diario NY.
El citado medio mencionó que la acusación también habla de los presuntos bonos que recibieron Weisselberg y otros miembros de la organizacion empresarial del expresidente Trump, y que nunca fueron reportados formalmente en la contabilidad.
A pesar de las acusaciones, el exdirector financiero de la firma de Trumo, quien se presentó ante el juez, se declaró inocente. La Fiscalía de Manhattan presentó 15 cargos en contra el antiguo ejecutivo, a quien se le concedió la libertad condicional, tras ser arrestado.
Cabe destacar que el expresidente Trump, al igual que su hijo Donald Trump Jr., no recibieron acusaciones directas en medio del esquema de presunto fraude, pero fueron mencionados en los documentos como beneficiarios de las acciones.
“Los beneficiarios del esquema recibieron porciones sustanciales de sus ingresos a través de medios indirectos y encubiertos, con una compensación que no fue declarada o mal informada por Trump Corporation y Trump Payroll Corp”, advirtió el documento.
La Fiscalía estatal de Nueva York, organismo que también está trabajando en la investigación contra la compañía de Trump, que ahora es de carácter criminal y no civil, aseguró que llevará el caso hasta las últimas consecuencas.
“El día de hoy es un día clave en la investigación criminal en curso de la Organización Trump y su director financiero, Allen Weisselberg. En la acusación, alegamos, entre otras cosas, irregularidades financieras por las cuales la Organización Trump participó en un plan con Weisselberg para evitar pagar impuestos sobre ciertas compensaciones“, dijo la fiscal Letitia James. “Esta investigación continuará y seguiremos los hechos y la ley dondequiera que nos lleven”.
Dentro del presunto fraude fiscal cometido por la compañía del expresidente Trump, se menciona el supuesto incumplimiento con el pago de impuestos sobre la renta estatales y federales en unos $1.7 millones de dólares en compensación.
Una vez emitidas las acusaciones, la Organización Trump negó que hayan tenido conductas delicitivas y calificó todo como parte de una persecución política para fectar al expresidente Trump, quien ha insinuado que tendría intenciones en volverse a lanzar a la Presidencia del 2024.
“Allen Weisselberg es un esposo, padre y abuelo amoroso y devoto que ha trabajado en la Organización Trump durante 48 años. Ahora el Fiscal de Distrito de Manhattan lo está utilizando como un peón en un intento… de dañar al expresidente”, aseguró un vocero de la organización Trump, en un comunicado, siguiendo la postura de Trump, quien ha definido todo como una “cacería de brujas”.