Este viernes venció el plazo dado por el Senado para alcanzar un acuerdo sobre el paquete de nuevos estimulos que ayudaría a millones de estadounidenses a enfrentar los efectos de la pandemia del COVID-19, y tras el fracaso de las negociaciones, el presidente Trump lanzó una advertencia.
Luego de conocerse que la jornada del viernes, en la que participaron entre otros, la presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, el líder de la minoría demócrata Charles Schumer, el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin y el jefe de Gabinete de la Administración Trump, Mark Meadows, fue infructuosa y no se llegó a ningún acuerdo, Trump anunció que decidirá el tema de los alivios de manera unilateral.
“Pelosi y Schumer solo estaban interesados en el dinero de rescate para ciudades y estados demócratas mal administrados. ¡Nada que ver con el virus de China! Quieren un billón de dólares. No hay interés. ¡Vamos a hacerlo d eotra manera!”, dijo el mandatario, reafirmando su advertencia del día anterior de que zanjará las diferencias, a través de una orden ejecutiva con la que el gobierno decida los montos de varios planes de ayuda, no de todos.
“Al salir de la Oficina Oval de Ohio, notifiqué a mi personal que continúe trabajando en una Orden Ejecutiva con respecto a la reducción de impuestos sobre la nómina, las protecciones por desalojo, las extensiones por desempleo y las opciones de pago de préstamos para estudiantes”, dijo Trump.
Y en el actual ambiente, donde parece poco probable que se llegue a un acuerdo, el temor de muchos es que la Administración Trump decida montos insuficientes sobre asuntos como los cheques de desempleo, que los demócratas piden mantener en $600 semanales hasta enero del 2021 y de los que los republicanos han ofrecido solo $200, hasta octubre.
El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, se mostró desanimado y dijo: “Desafortunadamente, hoy no tuvimos ningún progreso”.
A su salida de la fallida reunión, Pelosi, quien pide un plan de $3.4 billones de dólares, contrario al plan de $1 billón que proponen los republicanos, dijo a los reporteros que el Gobierno Trump se negó a aceptar la propuesta de que el paquete de ayuda fuera de $2 billones. Específicamente, los demócratas aceptaron bajar su plan a $2.4 billones, pero los funcionarios de la Casa Blanca dijeron no moverse del billón que plantean.
Ante el anuncio de Trump de trabajar en una orden ejecutica, el líder de la minoríá demócrata, calificó la medida como muy grave, de llegar a hacerse realidad, lo que pondría fin a las negociaciones del paquete de estimulos. “Las cosas empeorarán”, advirtió Schumer.
La Casa Blanca también emitió un mensaje mostrando la seriedad con la que Trump está contemplando salir al paso con una orden ejecutiva.
“Si los demócratas no llegan a un acuerdo, el presidente Donald Trump buscará acciones ejecutivas para extender el alivio económico para el pueblo estadounidense”, dijero en su Twitter oficial.
El Jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, manifestó sobre la posibilidad de una orden ejecutiva para definir los alivios: “Esta no es una respuesta perfecta, seremos los primeros en decir eso, pero es todo lo que podemos hacer, y todo lo que el presidente puede hacer dentro de los límites de su poder Ejecutivo”.
En cuanto a los cheques de alivios de $1,200, tema en el que parece haber un consenso entre republicanos y demócratas, los funcionarios de Gobierno manifestaron que Trump no sancionará sobre ese tema, por lo que quedaría en el limbo.
En medio del diálogo fallido del viernes, la advertencia de la orden ejecutiva de Trump, y las esperanzas de nuevas ayudas económicas de millones de estadounidenses, por ahora habrá que esperar a ver que decisiones toman las partes envueltas en las negociaciones en las próximas horas y cual de los dos partidos está dispuesto a ceder en el pulso que hasta ahora sufren los más necesitados.